40's:5

Si Kobe representaba la Tragedia Humana, Hong Kong era la personal.

Nada más reconfortante que comprobar que de aquello, ya nada queda.

China en mi cabeza, es una amalgama amorfa y rubicunda de colores y sabores, de sonidos y de emociones.

Por encima de todo, de la Ciudad Prohibida y de la Muralla, del desierto y de la montaña, siempre Hong Kong, concretamente Chungking.

Decir que ya lo había recorrido y olfateado 2046 veces no está de más pero quizá sobra.

Pues el primer decreto decretado fue ese, llegar ahí, dormir ahí.

Antes de viajar, así como estudié Japón, investigué unas cuantas cosas sobre la situación actual del emblemático lugar, me percaté de su seguir y de su vigencia. Hice ojos sordos a todo aquello de inseguridades y de razas, de filas y de incomodidades.

Y llegué.

Antes que TODO, como ya lo saben, llegué de noche….muy noche.

Un bello vuelo, precedido de un emotivo Adiós.

Y se hizo Hong Kong….se hizo la China.

Alrededor de las 2 AM, el aeropuerto gozaba de un aire fantasmal, como si solo esperara mi vuelo…como si solo me esperara a mí. Igual, chingón y bien señalizado, moderno y útil. A esas horas de la madrugada tales características resultan vitales.

Y empiezan las perversiones.

Y me voy un poquititito pa’tras.

Desde mi llegada a KIX, literal, al bajar del metro, no estoy seguro si es la última estación de la línea, creo que sí, de mi vagón bajaríamos no más de 6 ú 8 personas. 5 mts delante de mí caminaba un orientalito simpático de mirada amigable y monas piernas. Durante el caminar, tal distancia se acrecentaría a 25 mts debido a mi baba, era mayor mi babear por KIX que mi perversión.

El vuelo comprado Osaka-Hong Kong, fue en una aerolínea Japonesa al parecer de muy reciente creación y de bajo costo….pero al decir esto no se piense que es como la de bajo costo mexicana nooooo. De bajo Costo y airadamente profesional, como todo lo vivido en el pueblo nipón.

Pues como la línea era la más nueva de todo el aeropuerto, sus mostradores no eran muy visibles y obvio yo repartía mi concentración 80% a KIX y 20% a las piernas del orientalito, así que menos daba con la aerolínea, y como llevaba según yo buen tiempo menos me interesaba dar con mi mostrador…. Pues que me percato que él se dirige a……. ah! Al kiosco informativo y pero si en chinga como que lo alcanzó, escucho claramente que el oficial le indica:

- …….vuelo a Hong Kong al final del pasillo D!

Llegó cuando él justo se retira, mis ojotes se cruzan con sus ojitos y me percato de su sonrisa simpática….

El guardia me dice:

- Ah! Es el mismo!!!! Por allá!

Y mis ojotes brillaron fantaseando extraño.

Si, extraño porque yo juré ser decente en éste viaje.

Efectivamente, se dirigió a “mi” vuelo en “mi” aerolínea, no les he dicho, por si se les ofrece, Peach es el nombre…….. Pues que se forma en la fila para documentar y justo me tocó tras él, tuve alrededor de 10 minutos para observarlo, se percató y me sonrió. Portaba shorts largos, algo ajustados, como de….. oficial de policía. Usaba también un gorrito medio modernon que le daba un aire a…… que raro, también a oficial de policía. Cerré mis ojotes y vi a Tony en…… Chungking Express!!!!

Para no hacer el cuento largo (se fijan? Se suponía que ésta entrada ya iba a ser China y aún no salgo de KIX!) volamos, cada quien en su asiento, la verdad la verdad la verdad no soy tan perverso como parezco, lo dejé de ver y se me olvido.

Lo malo (para él) es que de bajada se me vuelve a atravesar…. Pero ahora siempre a un par de metros delante. Como realmente era noche y realmente el aeropuerto lucía desértico mis ojotes no cabían del asombro…tanto rincón oscuro!

Y que veo una casa de cambio abierta con una ligera filita de no más de 3 personas, que ni la pienso…digo digo digo…Japón estuvo de la verga en materia de efectivo, y yo bien chuchis, desde aquí llevé algunos dólares por aquello de que no te entumas, los llevaba intactos conmigo, dije, ps ora es cuando pa’no errarle! Y que me formo, sigo mirujeando y al girar mi cabecita 180° quien creen que estaba justo tras de mí? Misteriosamente el doble de Tony me esperaba con una sonrisota de oreja a oreja…y le correspondí. Con más pena que arrojo titubeé. Consigo mis moneditas hongkonesas y sigo mi caminata. Al llegar al lobbisote que veo un cajero de los cómplices del fraude….y que puede más mi necesidad y mi temor y me decido a probar si mis tarjetitas funcionan….ya traía efectivo local, pero quería cerciorarme que no pasaría las de Japón…. Y no hubo problemas. Ya me sentía más tranquilo con suficiente efectivo.

Retomé mi ruta y otra vez me cruzo con…..llamémosle Tony, ahora íbamos lado a lado…. Y solo había sonrisas discretas, así como nuestras miradas.

A esa hora, el único transporte vivo a Hong Kong eran los taxis, y sincronizaditos caminábamos rumbo a ellos…sin cruzar una palabra hasta ese momento.

Mimetizados al llegar a la base, nos detuvimos y volteamos a un lado y a otro. En cada lado había una línea distinta de taxis. Nos volteamos a ver. Me atrevo a preguntar:

- Cuál será la línea confiable?

- Cualquiera, no desconfíes…..

ZAS!!!!! La sentí directa…..

- No es desconfianza la mía, solo ignorancia.

- A dónde vas?

- A mi hotel…..y tu?

- También…..al Nikko y tú?

- A Chungking

- En Hong Kong?

- No…en Kowloon…

- Si quieres te llevo en mi taxi?.........................

Juroles que mis antenitas de vinil pero si en chinga se pusieron como locas…a madres.

Me sentí niño…sentía que mi santo Padre y Frida y Chavela y todos mis difuntos me decían: MUCHO OJO!!!!! CUIDADO!!!! Mientras que todos mis demonios me decían: No seas culo Champignon pendejo! Ve! Aprovecha! Revuélcate como lo que eres!!!!

Y a quien creen que le hice caso?????

Pues los deje que se pelearán entre ellos y ya cuando acordé iba sentado en la parte trasera del taxi, notando que de repente, mi pierna era rozada por su rodilla…como zombi me subí, como zombi dimos instrucciones, como zombi acepté el acuerdo.

Bien yo….. de su nombre ni me acuerdo, ya saben que los nombres en ésos casos importan poco o casi nada. Nacido en Hong Kong asentado en Taipei, comerciante, representa una marca de consumibles para hospitales…viaje de trabajo.

Llegamos a Chungking. Una jauría de dealers rodea al instante el taxi, afganos magrebíes indios…y no sé cuántas razas más. Todos ofreciéndome una cama para dormir.

Tony más impresionado que yo (y al parecer algo asustado) al abrir mi puerta me dice:

- NO!!!! No te quedes aquí….es muy peligroso!!!!

Yo ya estaba preparado para ésta escena, mi respuesta inmediata iba a ser de calma y seg….cuando click! Me cae el veinte….

- Vente conmigo a mi hotel!

Al escuchar la invitación yo ya estaba cerrando de nuevo mi puerta del taxi.

Al Nikko por favor le dije al señor conductor.

He decidido que esta entrada solo ocupará mi llegada a Hong Kong porque aún no llego a Chungking y ya estoy en la 4ª cuartilla…….

De Tsim Sha Tsui en Kowloon a Hong Kong, lo dividen 400 mts en la China Continental, y el Mar de China, un estrecho de quizá otros 500 mts.....ps que el taxi agarra no se que camino y literalmente al unísono dijimos:

- Stop!

Yo desquiciado y ahogandome en mi baba y él de gusto.....

Nos bajamos y me mostró una imagen muy conocida, la primera vez que la vez sinceramente paraliza.

Hacía una semanototototota que no dormía en un cuartotototote así ni en una camototototota de ese tamaño. Si les comenté de los tamaños de los japoneses verdad???? Pues ante lo vivido previamente una King size me parecía una alberca olímpica…..

Que riiiica cama, fresca, cálida, arropadora. La suavidad de sus sábanas nunca la olvidaré.

Tony fue un caballero y punto.

Nos quedamos dormidos por ahí de las 6 de la mañana….. y solo dormimos un par de horas, porque él tenía su primer cita a las 9. Él hizo que se bañaba y yo hice como que seguía dormido….. minutos después viene por mí y me invita a la regadera…..ahhhhhhhhhh que rica es el agua de la China…….. Pues cuando acordamos faltaban 10 minutos para las 9. Pero si en chinga nos vestimos, agarramos mi maleta y un taxi del hotel no transportó…… el sol de Hong Kong era brillante, encandilante y encantador.

Lo encontré precioso……. inolvidable.

Me llevó hasta la justa entrada principal de Chungking y nos dijimos Adiós……. Hermoso. Como lo dicen los adultos.

Al bajar del taxi me detuve un instante y contemplé la famosa fachada…el emblemático letrero.

Volví a dar gracias…..y entré.